El incidente cobró difusión a través de imágenes que se conocieron por medio de redes sociales.
«Me imagino que debe ser un problema de toda la Costa, donde la gente se distiende, y lógicamente, cuando uno se distiende, olvida estos cuidados», añadió el mandatario en declaraciones radiales.
En el Operativo Sol, que fue destinado como es de costumbre a la prevención del delito durante el verano, pero también por primera vez a la prevención sanitaria, se destinaron 800 efectivos de la Policía Bonaerense, la gran mayoría de ellos, unos 550, integrantes de fuerzas especiales.
El intendente de Pinamar, Martín Yeza, había advertido días atrás de un crecimiento intrageneracional de casos de coronavirus, tras recibir críticas por determinar el cierre de playas durante el primero de enero último.
Yeza señaló que se «reforzaron mucho los controles» porque observaron que «en los bares se respetan los protocolos, pero la gente toma la calle» sin respetar el distanciamiento.